Te acordás?

 Cuando íbamos al almacén del barrio?

 y mirábamos ansiosos por el vidrio de la lata de galletitas?

 A mi me daban ganas de traspasarlo , meter mi mano y atragantarme..

Las tenía al alcance de mis ojos, sobre un mostrador, pararme ahí y ver cual elegiría me provocaba mariposas en la panza..

 y cuando Elba la almacenera levantaba la tapa era como mmmm!! me las como todas!

En realidad muchas veces podíamos meter la mano y sacar un puñado...

En mi barrio no habían galletiterías( conocí el término aquí en Buenos Aires),solo estaba Elba detrás del mostrador y las galletitas tenían todas el mismo sabor: vainilla

 Pero que lindo que era! volver a casa con los 200 gramos envueltos en papel  estraza( se sigue llamando así? o ahora es papel madera?) con los dos nuditos hechos en los extremos( siempre intenté que me salga un envoltorio así pero jamás lo logré!), y aguantarme las ganas de comerme una antes de llegar a la hora de la leche..

Por eso cuando me encontré con esta lata sabía que se quedaría así, tal cual era( un poco mejorada nada más) 

 Pues además de añeja( mas que yo eh?) es de las que realmente veía en el almacén de Elba, en mi Uruguay querido...